La planificación estratégica y el presupuesto son componentes integrados de la gestión orientada a resultados dentro de todas las empresas, ya que, mientras los planes estratégicos señalan la orientación y el objetivo, el presupuesto económico provee recursos para poder implementar estos planes, en cada una de las áreas que se destine.

Un plan estratégico que este fuera o no vinculado con la realidad del presupuesto carecerá de valor, ya que cuando es completo y adquiere su plena utilidad es cuando contiene la cuantificación de los recursos financieros necesarios para implementarlo, de lo contrario se correría el riesgo de no poder hacer frente a compromisos que se adquieran.

La planificación estratégica dentro de la propia empresa ayudará a definir la visión y compartir la dirección, los objetivos y las acciones que llevarás a cabo para alcanzar esas metas, y los compromisos fiscales, auditados y previamente anticipados en el presupuesto.